Junto a otros seis usuarios de la fundación, prepararon las instalaciones para pintarlas y darles un aire nuevo. Juntos vivieron una jornada de trabajo donde fomentaron, casi sin darse cuenta, la inclusión mientras se esforzaban en que todo quedara como nuevo. En la jornada, que duró más de cinco horas, pintaron mucho más de lo que habían planificado en un primer momento, y dejaron acondicionados varios pasillos, habitaciones, baños una sala común y un despacho.

Joaquín, uno de los Voluntarios Atresmedia, comentó que este voluntariado le había servido «para conocer la gran labor que realiza la Fundación Manantial con las personas que presentan alguna discapacidad mental. No te imaginas lo específico que puede ser cada caso hasta que te lo explican o lo ves».

Por supuesto también hubo tiempo para compartir un aperitivo entre todos y descansar después del duro trabajo poniendo en común la jornada. Uno de los usuarios de la Fundación Manantial quiso dar las gracias «por la oportunidad de hacer un voluntariado para devolver algo de lo que me ha dado el centro».

Para Almudena, esta fue su primera experiencia como voluntaria: «me ha encantado conocer a personas maravillosas y ver la gran labor que hace la fundación con personas con problemas de salud mental. Fue un día muy bonito. Repetiré sin ninguna duda».